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| Foto: Eric Limon / Shutterstock |
¿Se creará una industria de sabores?
Investigadores están intentando decodificar exactamente qué le da a la marihuana su distintivo sabor. En un estudio publicado en Plos One, los científicos han conseguido aislar algunos genes que algún día podrían ayudar a los cultivadores a estandarizar olores y sabores particulares para el cannabis.
Los investigadores comparan su trabajo de decodificar sabores de cannabis con el de la creciente industria vitivinícola, la cual gira en torno a sabores que pueden ser replicados. “Es similar a la industria del vino que depende de definir variedades como Chardonay o Merlot para productos de alto valor,” explica Jörg Bohlmann, profesor de la Universidad de Columbia Británica. De hecho, el número de genes responsables del sabor del cannabis, es comparable con el número de los que son responsables del sabor en la vid.
Gran parte del aroma de la marihuana es dictada por ciertos compuestos conocidos por monoterpenos y sesquiterpenos , los cuales contribuyen a los distintos sabores de la planta cuando es consumida. Aunque se han realizado muchas investigaciones sobre los componentes activos que dan el “subidón” y otras tantas sobre los beneficios medicinales del cannabis, muy pocas se han realizado sobre estas otras moléculas. Estos compuestos son conocidos en la industria como terpenos.
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| Llegaría el día en que podríamos tener aromas agradables en la planta |
En vista de esto, los investigadores del estudio, analizaron el genoma de las plantas de cannabis en busca de los genes que les dan sus característicos sabores. Ellos consiguieron identificar 30 genes para los terpenos sintasas que se cree, contribuyen al bouquet de sabores.
Los genes específicos que han sido decodificados juegan un rol importante en la producción de moléculas como limoneno, mirceno y pineno. Estos son conocidos por agregarle fragancia y sabor a la planta. “El compuesto limoneno produce un sabor tipo limon y el mirceno produce ese sabor medio frutado y terroso característico del Purple Kush,” dijo la co-autora Judith Booth.
Curiosamente, la investigación que apuntaba solo a los olores y sabores de la marihuana, no solo revela la importancia de los genes en estos aspectos sino también en la fortaleza de sus propiedades medicinales. Por ejemplo, encontraron un gen que produce un terpeno conocido como beta-cariofileno. Esta molécula no solo contribuye con el sabor sino que interactúa con los receptores de canabinoides en nuestras células. Los investigadores sugieren que esto podría tener influencia en el valor medicinal.